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sábado, 2 de mayo de 2020

Mendoza - Gatti (Rosario)

32°56´25.93”S - 60°44´21.29”W
24 mts SNM
(Ubicación aproximada, tomada en la esquina de calle José de Calasanz y Gallegos)

Su creador

Cuando la tinta del acta de fundación del Aero Club Rosario aún se encontraba fresca, numerosos jóvenes acudieron a la institución con el objeto de hacer realidad el sueño de convertirse en los nuevos héroes del aire. Entre ellos se encontraba Humberto Esteban Gatti; un joven de 26 años miembro de una típica familia inmigrante que explotaba una fábrica de colchones en el centro del Rosario de 1921.

Humberto Esteban Gatti (Marcelo Miranda)

Al igual que todos, Gatti estaba impactado con las aventuras que se escuchaban de los ases del aire de la Gran Guerra ó las proezas de los pilotos nacionales que cotidianamente informaban los diarios locales. Se había propuesto convertirse en piloto y esto lo había llevado a efectuar algunas gestiones ante los organismos oficiales para adquirir una aeronave, mucho tiempo antes de que aprendiera a volarlas. Esto lo ponía un paso delante de los otros jóvenes, pues describía claramente su personalidad.

A mediados de 1921, obtuvo su brevet de piloto y con algunos ahorros personales compró un pasaje en barco a Italia con el doble propósito de visitar a su primo y adquirir tantos aviones como pudiera. Su primo era en realidad Mario Colombo, ex instructor en el Corpo Aeronáutico Militare durante los años de guerra y un eximio piloto. Con su ayuda, Gatti se hizo de cuatro aviones SAML S.2, con motores Fiat A.10 de 100 hp. de 6 cilindros refrigerados por agua. Estos aparatos eran rezagos de guerra y costaron un total de $ 95.000 M/N.

Con estos aviones, ambos desembarcaron en el Aeródromo de El Saladillo con el firme propósito de establecerse con una empresa de servicios aeronáuticos. Tres de los aviones importados fueron armados y probados por Colombo y Gatti. Este último comenzaba a hacerse como piloto y aprovechaba estos vuelos para perfeccionar su técnica bajo las tutelas de su primo.

El Aero Club Rosario explotaba el terreno en el que se encontraba el Aeródromo de El Saladillo y Gatti debía abonar 150 M/N por aeronave, además del combustible consumido. Prontamente se hizo evidente que para cubrir gastos, la empresa debía achicarse y en consecuencia ambos primos resolvieron vender unos de los S.2. Quien adquirió la aeronave lo hizo con su curso de aprendizaje incluído que sería impartido por Colombo. Desgraciadamente, durante el transcurso de uno de estos vuelos, la aeronave se accidentó en la localidad de Morteros (Pcia. de Córdoba) falleciendo Mario Colombo, su alumno y un circunstancial pasajero.

El SAML S.2 R196 de Humberto Gatti en vuelo sobre la costa del Río Paraná frente a Rosario 06Ene35 (Marcelo Miranda)
Gatti aún contaba con dos S.2 y aunque había perdido a su socio y primo, persistió en la empresa. Pero la surte no estaba de su lado. A tan sólo una semana del fatal accidente, Gatti contrató un piloto para que lo ayudara con los vuelos que debía efectuar en un festival a realizarse en la localidad de Cañada Rosquín. Durante el vuelo de traslado, su compañero se vió obligado a aterrizar en Salto Grande (Prov. de Santa Fe) de tal suerte que le produjo serios daños en su aeronave. Gatti no pudo continuar solo el viaje y cuando decidió aterrizar para asistirlo, su maniobra terminó con igual resultado. En pocos días se encontraba con tres aviones destrozados, sólo y en bancarrota.

Gatti aún conservaba el cuarto S.2 que permanecía encajonado. Las deudas que aún mantenía en conceptos de hangaraje con el Aero Club Saladillo, no le permitían ponerlo en vuelo y debió emplearse como “chofer de plaza” para refinanciarse. Los registros indican que prontamente logró reponerse de sus deudas, pues durante Julio de 1922 se encontraba realizando trabajos de reconstrucción de uno de los S.2

El Aeródromo Mendoza

Los altos precios de hangaraje que Gatti debía pagar para el resguardo y cuidado de sus aeronaves se equiparaban con los costos de habilitar y operar su propio aeródromo. Este balance lo llevó a buscar un campo apto para su cometido y efectuar las negociaciones necesarias para logar que se lo arrendaran. El campo seleccionado estaba ubicado en una zona de chacras ubicada al Oeste de la ciudad, en el sector Sur del barrio fundado por el Ferrocarril Central Argentino y residencia tradicional de la comunidad inglesa de Rosario. Este campo de aviación formaba parte de una lonja de terreno de chacra propiedad del Señor Domingo Perosio que estaba ubicada sobre la prolongación de la calle Mendoza y en dirección al Oeste a partir de la intersección con calle Wilde. Construyó un pequeño hangar y comenzó a utilizarlo para resguardo y taller de aeronaves. Con el tiempo el campo se conoció popularmente como “Aeródromo Mendoza” y Gatti logró operarlo hasta que se retiró dos décadas después. Sus actividades consistían, en esos años, en desplazamientos a las localidades del interior para ofrecer demostraciones de vuelo, discretas acrobacias y vuelos de bautismo.

El 25Set25 el Aero Club Rosario había organizado un festival en el campo de El Saladillo. Gatti fue invitado y acudió gustoso a participar del mismo con su S.2. Luego de la jornada festiva, Gatti decidió dejar su aeronave en uno de los cobertizos del campo, pero definitivamente la surte se ensañaba con Gatti y con sus SALM. Esa noche se abatió sobre esa zona un verdadero huracán que destrozó por completo el cobertizo con todas las aeronaves en su interior. Es más, una fuerte ráfaga de viento, arrastró el SALM hasta las vías del Ferrocarril Central Argentino lindantes con el aeródromo con tal mala suerte que el tren 113 proveniente de Retiro lo embistió y arrastró destrozándolo completamente para luego arrojarlo al costado de los rieles.

Para fines de los años veinte, Gatti había logrado recuperar dos S.2 pero su flotilla quedaría reducida a uno, el 26 de octubre de 1929. A las 19.35 hs. de ese día su mecánico Angel Perosio (hijo del propietario del campo desde donde operaba) estaba preparando uno de los S.2 para un vuelo a realizarse el día siguiente, cuando tropezó con una lámpara alimentada con gasolina con la que se alumbraba y comenzó a incendiarse una de las alas del avión. En pocos minutos el fuego envolvió todo el avión que quedó destruido junto con el hangar. Con el tiempo, Gatti logró reconstruir el hangar y continuó operando desde el mismo predio.    

La década de 1930 resultó particularmente brillante dentro de la trayectoria aeronáutica de Gatti no sólo por la variedad de actividades que desarrolló sino también por la incorporación de dos nuevas aeronaves a su flota. Se trataba de dos Morane-Saulnier Type XXXV AR (también denominado Type A.R.35 o M.S.35R) con motor rotativo Le Rhone de 80 H.P. El primero de ellos lo adquirió el 16Ago33. 

El SAML S.2 R196 y el Morane Saulnier en el Aeródromo Mendoza (Omar García vía Marcelo Miranda) 

Visitantes posan frente al Morane Saulnier de Gatti. Detrás el SAML R196 (Omar García vía Marcelo Miranda) 
El 16 de setiembre de 1934, Gatti debió poner a prueba su temple nuevamente. Su mecánico Costa resbaló mientras estaba limpiando con nafta un magneto del motor Gnome de 100 H.P. del Morane-Saulnier. Para amortiguar la caída se tomo de la hélice, la movió y puso en marcha el avión, se produjo un corto circuito en el magneto y se produjo un incendió que destruyó totalmente la aeronave.

Estado del Morane Saulnier Parasol luego del incendio del 16Set34 ((Omar García vía Marcelo Miranda)
Humberto Gatti frente a su Morane Saulnier Parasol R239, bautizado "Alfredo J. Rouillón", equipado con un motor radial fijo de cinco cilindros (Omar García vía Marcelo Miranda)
El Morane Saulnier bautizado "Río de la Plata" en el Aeródromo Mendoza  (Omar García vía Marcelo Miranda)
Acostumbrado a lidiar con la mala suerte, Gatti continuó volando con el maltrecho SALM S.2, hasta que en 1937, adquiere de Hugo Alfredo Schuster (también de Rosario) el Klemm L.25-I R325 (c/n 53) con motor Mercedes-Benz de 25 hp. Este avión se registró LV-QDA el 01Jul38.

El S.2, que había sido registrado LV-XAA, fue inhabilitado para volar en 1953, aunque esta máquina se encontraba para entonces fuera de servicio desde hacía muchos años por lo que Gatti realizó sus últimos vuelos con el Klemm L.25-I LV-QDA. Con ambos aviones Gatti continuó volando por mucho tiempo, pero lentamente fue abandonando la actividad, hasta que en 1944 se retiró definitivamente. Con ello se perdió el rastro del Klemm y se dio por extinguido el Aeródromo Mendoza.


Humberto Gatti falleció naturalmente el 08Ene67 

Ubicación de la Chacra Perosio sobre un plano satelital de el área sur-oeste de Rosario. En algún lugar dentro de este perímetro se encontraba el Aeródromo Mendoza ocupado por Gatti
Agradecemos a Marcelo Miranda por su colaboración para la realización de la entrada de Mendoza - Gatti. Esta entrada es parte de un artículo completo sobre la vida de Humberto Gatti publicado en la revista Lima Víctor N°3 Primavera 2003 (Pgs. 25 a 29). Clickee sobre el link para tener acceso a ella.



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